domingo, 30 de diciembre de 2012

Y el año acabo bastante bien...

Y el año acabo bastante bien...

Después de pasar momentos duros y pensar en dejar el trail, he acabado el 2012 con muy buenas sensaciones, con varios entrenamientos de montaña con el equipo Trail Albacete porVillena y Cieza que me han hecho cambiar de opinión. También he disfrutado mucho con los entrenamientos por Chinchilla con los compañeros del C.A. Chinchilla y como no de la ya tradicional San Silvestre con mi familia.









  









martes, 4 de diciembre de 2012

Balance de temporada


Llega Diciembre y es el momento para mirar hacia atrás y valorar la temporada que ahora acaba y sobre todo plantearse retos para el año que entra. Sin embargo este año ha sido un año atípico,  totalmente marcado por la lesión que tuve a finales de abril en la maratón de Finestrat, hasta entonces la temporada estaba siendo buena. Ya había tomado la decisión de dejarme  el asfalto y pasar a la montaña y pasar a ser  cien por cien corredor de trail, con el objetivo de ir finalizando carreras cada vez más largas con el objetivo de competir en un gran ultra trail. 

La cosa iba bien, acabe el año 2011 con una buena experiencia en la carrera de Chiva de  de 64,5 km y un desnivel de +3000, así que en marzo comencé fuerte, con la Perimetral de Benissa, con distancia y desnivel parecido a Chiva, pero con más dificultad técnica. Y fue dura, sobre todo la subida a la sierra de Bernia, acabe renegando de los ultras, no todas se iban a dar tan bien como Chiva.

 

Así que en abril cuando acudí a la carrera de montaña de Cuenca mi intención era recuperar sensaciones y volver a disfrutar del placer de correr por la montaña. Salí tranquilos, todo salió bien, disfrute y logre un buen puesto. 

 

Otra vez volvía a darle vueltas a correr una gran ultra, y mientras me decidía en cual me aventuraría, me apunte a la maratón de Finestrat en Benidorm. El plan era perfecto, aprovechar el puente para correr una maratón y disfrutar de unos días con la familia en la playa. Pero la cosa se fastidio y antes de llegar al km 10 me torcí un tobillo que me dejo en el dique seco durante más de seis meses.


 La cosa se complico, no era un simple esguince, además no era precisamente el primero sino que era el último de los muchos que he tenido. Pase el verano entrenando mucha natación, distancias importantes a veces 3800 m. (la distancia del Ironman) y no era casualidad hacer esa distancia. También empecé a montar en bicicleta de montaña, dentro de mis limitaciones y la cosa me fue enganchando. Pero de correr nada de nada, cada vez que lo intentaba con dolores en el tobillo. Masajes, descanso y desesperación. Y así estuve hasta septiembre momento en que el fisio me dijo que empezara a correr, primero 20 minutos, luego 25, 30, 35 hasta llegar a 45 minutos… uf, que lejos estaba ahora las intenciones de acabar algún día un ultratrail, ni siquiera de correr por la montaña. Mi decisión estaba tomada, adiós al trail y a empezar una nueva aventura, quizás con el triatlón.


Seguí entrenando, aún con dolores después de correr, poniéndome hielo… y un día empecé con los caminos de Chinchilla, luego alguna senda, hasta que en noviembre quedamos los del Club de Trail para hacer un entrenamiento por la sierra y allí estaba yo, con los tobillos vendados y con muchísimo cuidado. Y la cosa se dio muy bien, disfrute muchísimo, las bajadas las hacía muy despacio y con mucho cuidado, pero la sensación de correr por esos sitios tan bonitos fueron muy buenas.


Y en eso llega diciembre, hora de hacer balance de la temporada que acaba y plantearse objetivos para el año que entra, y ahora ¿qué hago? Desde luego la lógica y el sentido común me dice que deje el trail, que mis tobillos son de cristal y me meta en otras cosas, pero el corazón….

De cara al próximo año me tomare las cosas con calma, y según como se vaya dando y como responda mis tobillo haré una u otra cosa. Mi intención es estrenarme en el triatlón (a mi ritmillo, sin pretensiones) y correr alguna carrera de montaña, disfrutando. Y si la cosa se da bien, pues alguna maratón de montaña, algún triatlón más largo… que se yo hasta donde.


domingo, 18 de noviembre de 2012

Corriendo por la montaña ¡por fin!


Más de seis meses después de lesionarme en al Maratón de Finestrat el 29 de abril, he vuelto a correr por la montaña. Han sido meses de fisioterapia, de descanso, de salir de los nervios, de entrenar natación y bicicleta, de volver a correr poco a poco, con mucho esfuerzo, de cambiar el concepto de lo que son las distancias… Muchísimas veces he pensado que ya no podría volver a hacer trail y parece que poder, puedo, otra cosa es si debo.

 

El pasado domingo 18 de noviembre nos reunimos parte de los componentes del Evasion Trail Albacete para hacer un entrenamiento por Paterna-La Vegallera. La ruta es preciosa y más en otoño, recorre la Sierra de la Veracruz y la Sierra del Agua.  Con los tobillos vendados y con mucha precaución recorrí junto a mis 8 compañeros: Alberto, Oscar, Borja, Vicente, Pedro, Javier, Jose Carlos y Sylvia una ruta de 22 km y cerca de 1200 +. 

Y al finalizar que mejor forma de recuperarse que con unas cervecitas, guarrillas y panceta… No sé si debo volver a correr trail pero es que es difícil encontrar un deporte con el que disfrute tanto

 

 

domingo, 29 de abril de 2012

I Maraton de Montaña de Finestrat (MAMUFI). ¡Otro esguince!


El plan parecía perfecto; ir a pasar el puente a Benidorm con la familia y de paso correr una Maratón de Montaña en Finestrat a unos pocos kilómetros El viernes por la noche nadie que me hubiera visto habría pensado que al día siguiente iba a correr una maratón: cervecitas, helados, paseíto por aquí paseíto por allá... Los días previos a las maratones casi nunca he hecho lo que se aconseja, aún recuerdo las caipiriñas antes de la Maratón de Lisboa… pero no todo va ser correr.

Pero a las 6 de la mañana, ya era otra cosa y tenía la mente en la carrera. Esta vez iba a correr sólo con una pequeña riñonera, con poco peso. En Finestrat había quedado con Vicente, compañero de equipo, en principio correríamos juntos la carrera. Las típicas excusas de rigor: voy a correr tranquilo, he venido con la familia, a disfrutar, estoy preparando un ultra…. en el fondo los dos sabíamos que íbamos a salir con el cuchillo entre los dientes. Efectivamente al poco de salir, el grupo se corta en dos y nos vamos con los de cabeza, de tranquilidad nada. A los pocos kilómetros los que abren la marcha se equivocan en un cruce y se van por el camino equivocado, pasamos a ir de los primeros. El ritmo es alto, vamos dejando paso a los que encabezaban la marcha, pero el ritmo se ha acelerado. A estas alturas Vicente y yo ya hemos dado con nuestros huesos en el suelo, Vicente con peor suerte, se ha golpeado la rodilla. Seguimos bastantes rápidos, las sensaciones son buenas, aunque me pregunto si aguantare ese ritmo toda la carrera… Hacia el kilómetro 8 en una bajada muy técnica, me tuerzo un tobillo, desde el primer momento soy consciente de que ha sido un fuerte esguince. A Vicente que ha vuelto a ver que había ocurrido, le digo que continue, mi carrera se ha acabado.

Me llevan a Finestrat donde luego acudiría la ambulancia, una venda para salir del paso y a casa… fin de la carrera. Vicente finaliza con un tiempazo 5:30 y en el puesto 35 ¡Un fiera!

El año pasado en de mayo entrenando me torcí el tobillo izquierdo y estuve parado casi un mes, en el 2010 una tendiditos me tuvo en dique seco unos tres meses, en el 2009 otro esguince en la carrera de Alcaraz… y podría seguir enumerando un montón de lesiones, pero es parte del deporte y hay que aceptarlo. 

El próximo año seguro que vuelvo, el plan sigue pareciéndome muy bueno: un fin de semana en Benidorm con la familia y de paso una Maratón de Montaña… ¿Alguien da más?




lunes, 16 de abril de 2012

X Carrera de Montaña de Cuenca

X Carrera de Montaña de Montaña de Cuenca, prueba puntuable para la Copa de España y de Castilla-La Mancha


Después de lo mal que lo pase en la Perimetral de Benissa 63 km y +3000, una carrera demasiado técnica, larga, dura… en la que apenas había tramos buenos para correr, tenía ganas de volver a disfrutar de una carrera, de tener buenas sensaciones, así que la Carrera de Cuenca, más que tomármela como una competición intente que fuera algo así como una terapia. Con esa idea me plante en la línea de salida, salir a disfrutar, volver a reencontrarme con el placer de correr por montaña, aunque las condiciones no ayudaban mucho: el nivelazo de los corredores ya que era valedera para la Copa de España y el frio y viento que hacía en la salida no presagiaban una carrera cómoda.

Desde el principio me sentí bien y eso que a mí me cuesta empezar a correr, aunque salí muy tranquilo, veía que las sensaciones eran buenas, acompañaba además la belleza del recorrido y sobre todo que a pesar de los desniveles, el  tipo de terreno te permitía correr mucho, las sendas parecían alfombradas en comparación con lo pedregoso que fue la Perimetral. Además me encontré con Javi un compañero que estaba recuperándose físicamente y que iba a correr mucho más tranquilo de lo que para él es habitual, con lo que en muchos momentos fue tirando de mí, o más bien de un buen grupo que nos juntamos y eso ayuda mucho.



Ya me habían avisado al empezar que había que guardar fuerzas, que el perfil “engañaba”. Las subidas no eran demasiado duras y las bajadas no muy técnicas por lo que el ritmo era alto  y sin tregua.  Poco a poco te ibas desgastando y hacía el Km 22 empezaba otro tipo de carrera, subidas más duras menos correderas, el terreno más árido… o quizás es que yo ya lo veía así. Fue más o menos ahí cuando empecé a sentirme cansado, en una de esas subidas que se hace a golpe de riñón. Este es el tipo de terreno en el que peor me manejo.   A pesar del esfuerzo las sensaciones no eran malas, solo era cuestión de aguantar esos duros momentos y apretar en las bajadas.  Cuando ya quedaban pocos kilómetros para el final de esta carrera de 32 km y +1950 empecé a hacer las cuentas de la vieja para ver si podía finalizarla por debajo de las cuatro horas, iba justito. Ese objetivo me vino bien para apretar los dientes, superar las últimas subidas y lanzarme hacia la meta. Al final 3:56 y a pesar de haber sufrido, logre disfrutar de la carrera.

172      RUIZ,JOSE ANGEL      M-ABS  ESP  1969  EVASION TRAIL ALBACETE     03:56:55

Después de unos días han salido las Clasificaciones Oficiales del campeonato de Castilla-La Mancha y por increíble que parezca estoy el tercero de los veteranos. La Copa de Castilla-La Mancha de carreras por montaña se compone de dos pruebas, la de Cuenca y el Medio Maratón del Ocejón en Güadalajara el 2 de junio. Así que si todo va bien, allí estaremos






lunes, 12 de marzo de 2012

Perimetral de Benissa: Con los pies en el suelo

Después de 4 maratones y un ultra trail  sin vislumbrar lo que era el famoso muro, acabando con buenas sensaciones, no digo sin sufrir que eso es imposible en estas distancias, pero si disfrutando la carrera… ha sido la Perimetral de Benissa la que me ha puesto en mi sitio. Una carrera de 63,8 km y 3100 +, ni muy larga, para ser un ultra claro está, ni un desnivel insalvable, pero como sabemos los que corremos por montaña,” la dureza de las carreras se mide por la distancia y por el desnivel, en el caso de las carreras de montaña esto nos da el coeficiente de dificultad. Sin embargo hay un tercer elemento que juega un papel muy importante para determinar la dureza de una carrera de montaña y es la dificultad técnica, esto es un concepto más subjetivo y difícil de cuantificar”. En el caso de la Permietral, la dificultad técnica era muy alta. La subida a la sierra de Bernia a mitad del recorrido que te dejaba exhausto y las bajadas pedregosas como cuchillos hacían que la carrera tuviera una dificultad técnica mayor de lo que los números indican.
A las 6 de la mañana cerca de 400 corredores iniciábamos la aventura, con mucho viento y frio. Entre ellos 6 componentes del Club Evasion Trail Albacete: Javier, Vicente, Carlos, Silvia, Manuel y yo
Comencé  prudente sabiendo que la carrera era larga y aún convaleciente de un constipado inoportuno. Muy pronto se escapo Vicente en un estado de forma increíble, con el cual había corrido mi anterior ultra en Chiva que tan buenas sensaciones me dejo. Durante la primera hora pase sobre todo frio, mucho frio, y aunque la imagen era espectacular con los frontales de los corredoresiluminando la montaña y la luna llena al fondo, yo no apreciaba para nada la belleza del momento, sobre todo porque con el sudor frio me estaba quedando tiritando. Poco a poco procurando no forzar demasiado nos acercamos a la parte clave de la carrera: la subida a la Sierra de Bernia, realmente yo no me esperaba eso, a pesar de haber visto algún video y de conocer su dificultad, no me imaginaba que lo que iba a pasar allí era miedo. La carrera se convirtió en montañismo: cuerdas, trepadas, cadenas en las rocas… y sobre todo mucha tensión. Eso si, unas vistas espectaculares. Cuando dejamos de crestear la sierra y llegamos otra vez a la senda, me relaje, pero me encontraba agotado y me quedaba aún la otra mitad de la carrera.
Merece la pena ver las fotos a mayor tamaño para poder ver apreciar las dimensiones de la Montaña de Bernia
 A partir de ese momento mi mayor inquietud era que una pájara por falta de una buena hidratación o alimentación pusiera las cosas más feas, así que intente regular lo mejor que pude, comiendo bien y bebiendo mucho. Y así fueron pasando los kilómetros con un par de caídas de por medio, hasta que a unos 10 km del final y cuando ya pensaba que la meta estaba a la vuelta de la esquina, dos duras subidas seguidas, que en el perfil apenas se vislumbran acabaron de rematarme. En ese momento “decidí” dejarme de ultras y de gaitas, dejar de correr y hasta dejar de hacer deporte… Me sentí un idiota al creer que  podría ser capaz de correr un ultra largo y además no veía el motivo de intentarlo y me di cuenta de la dificultad y el mérito que tiene los que son capaces de hacerlo.
Poco a poco me fui acercando a meta con estos bonitos pensamientos, menos mal que el bocata, la cerveza, el jacuzzi y ver que a pesar de todo había logrado finalizar entre los 100 primeros me dejó mejor sabor de boca.
Respecto a mis compañeros… ¡EQUIPAZO! con mayúsculas: Javier, de nuevo el más rápido; Vicente, espectacular, menuda progresión, no hay quien lo pare; Carlos que pasa de la media maratón al ultra sin pasar por el maratón, ¡vaya debut!; Silvia, sin palabras, primera de su categoría y segundo pódium en dos carreras; y Manuel otro debut espectacular, consiguiendo finalizar una carrera durísima como pocas con esa distancia.
Respecto la organización de la carrera que corrio a cargo del  Grup de Muntanya Margalló fue muy buena:  muchísimos voluntarios y numerosos avituallamientos y al llegar a meta posibilidad de jacuzzi, masaje y sobre todo dos bocatas que te dejaban nuevo, bueno casi.
Javier Gomez Arias de Saavedra. Posición 54 ABSOLUTA M 9:41:07
Vicente Belda Ferri Posición 69 ABSOLUTA M 10:09:10
Carlos Sánchez Rodríguez Posición 87 ABSOLUTA M 10:36:39
Jose Angel Ruiz Felipe Posición 98 VET-MASC 10:47:33. 37 VET-MASC
Silvia Liante Lardiere Posición 153 VET-FEM 11:34:38. 1 VET-FEM.

Manuel Ruiz Martínez Posición 256 VET-MASC 13:13:21. 93 VET-MASC

Aqui os dejo la crónica oficial de la carrera, muy buena y detallada

No he encontrado fotos de todos mis compañeros de equipo, de unos hay muchas mientras que de otros hay muy pocas o ninguna